Sunday, October 7, 2012

palabras y pensamientos


Sean, pues, aceptables ante ti mis palabras y mis pensamientos
(Salmos 19: 14 NVI)

Muchas veces nuestras palabras contradicen nuestras intenciones y nuestras acciones contradicen nuestros pensamientos. Queremos hacer el bien, pero de nuestra boca sale enojo o palabras airadas. Queremos hacer los correcto, pero terminamos haciendo algo que hiere a otros.

Cuando nuestras palabras y nuestros pensamientos no se alinean con nuestras intenciones necesitamos primero pedir perdón y reconciliarnos con los que herimos. Después necesitamos hacer las paces con con nosotros mismos. Por ultimo, debemos sincerarnos con Dios. Para muchos la parte mas difícil es la de perdonarse a uno mismo. Pero en lugar de juzgarnos, debemos aceptar que somos imperfectos. El apóstol Pablo lo explica así:

Porque lo que hago, no lo entiendo; porque no practico lo que quiero hacer, sino que lo que aborrezco, eso hago. Y si lo que no quiero hacer, eso hago,... ¡Miserable de mí! ¿Quién me libertará de este cuerpo de muerte?  Gracias a Dios, por Jesucristo Señor nuestro.
Romanos 7:15-25 (NVI)

En efecto el apóstol Pablo reconoce que como hombres nos enfrentamos con una batalla perdida de antemano. Todos acumulamos imperfecciones, emociones que nos traicionan y nos desbordan. Sin embargo, cuando sostenemos la imagen de Jesus delante nuestra y leemos sobre sus obras y sus actos de misericordia y compasión, algo comienza a cambiar en nuestro interior. Se desarrolla una voz que te recuerda que tu eres mas grande que esa tentación de usar negativamente tus palabras. Esa guia interna comienza a ayudarnos a usar nuestros pensamientos y palabras de una manera digna y agradable a los ojos de Dios y a los ojos humanos. Nuestro carácter se alinea con el de Dios, poco a poco, a pesar de que en nosotros todavía habita el ser humano imperfecto y temperamental.

Si en el dia de hoy tus palabras y tus pensamientos no van en la misma dirección que tus intenciones, no trates de cambiarlo tu mismo a base de lucha. Entregale a Dios tu imperfección y encomiendale a El que te ayude a cambiar.

No comments:

Post a Comment